Una de las
primeras cuestiones para mejorar el rendimiento de nuestros hijos/as
es crear un buen hábito de estudio. Aquí te proponemos algunos
consejos ahora que empieza el periodo de exámenes y hay que
rentabilizar los esfuerzos.
1.
Prepara una zona de estudio.
Debe
ser una zona exclusiva para estudiar, puedes utilizar una parte de la
habitación de tu hijo, si no es posible adecúa otra parte de la
casa. Procura tener un escritorio y un mueble que sirva como
biblioteca para que pueda organizar sus libros, cuadernos y útiles
escolares. Asegúrate que la zona tenga buena iluminación y
ventilación y que sea agradable.
2.
Ayuda a tu hijo a buscar el mejor momento para estudiar
Los
expertos afirman que es recomendable estudiar primero y luego
realizar alguna actividad que al niño le guste, esto con la idea de
que no asocie el estudio con un castigo. Un buen momento puede ser
después de la merienda, para que no tenga el estómago vacío. El
tiempo diario que deberá dedicar tu hijo dependerá de la cantidad
de tarea que le asignen, sin embargo debes empezar poco a poco si no
tiene ningún hábito de trabajo en casa. Por ejemplo, dos tramos de
media hora cada uno e ir aumentado el tiempo hasta dos sesiones de
una hora. Si ya tiene hábito de trabajo sería conveniente que
estuviera 2 horas en dos tramos con un pequeño descanso entremedias.
(para alumnos de Secundaria)
3. Afirmar
la rutina de trabajo diario
La
clave del éxito en la creación de hábitos de estudio está en la
constancia y la disciplina. (un hábitos se logra repitiéndolo
durante 20 días).Si tu hijo ve reflejado su trabajo en buenas notas
estará cada vez más dedicado.
Esfuérzate
por que tu hijo estudie a diario al menos entre semana. Esto
paulatinamente creará en él hábitos de estudio productivos.
PARA SABER MÁS.
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